Perversos deseos
Susurras a mi oído
Fervientes miradas
Delatan lo prohibido
Tu palida piel
Me presume encendido
Y se ruboriza a mi paso
Mientras cae tu vestido
Me interno en tu cuello
Sensible, disfrutando
Impregnado de pasión
Tu expresas jadeando
La excitante situación
Acaricio imponiendo presión
Me estremece tu aliento
Y me pierdo en dirección
Al aljibe de tu cuerpo
Con lujuriosa devoción
Desato la bestia candente
Sumergido en tu sexo
Bebiendo el rio caliente
Tu temblor disperso
Deliciosa flor ardiente
Disfruto tus gemidos
acrecentando el apetito
Y desbordan tus sentidos
En un éxtasis llameante
Placer ígneo infinito
No hay comentarios.:
Publicar un comentario