Y mi respuesta fue el silencio
Miré la profundidad de sus ojos
Y a los sustantivos los hice verbos
De mis manos sintió el calor
Que le faltó en cada invierno
Leí historias en sus labios rojos
Y les di un final feliz con cada beso
No fue lo esperado lo que oyó
Fue lo que necesitaba su pecho
Entonces su corazón comprendió
Que la vida se alimentaba de sueños
Me confesó que su luz se apagó
Cuando la agobiaron los hechos
Nos fundimos en un abrazo los dos
Y desde su boca nació un nuevo deseo
Ella secó sus lágrimas y sonrió
Estaba inmersa en sentimientos
Entonces supo lo que era el amor
Cuando la piel fue más que sexo
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